La transformación digital va más allá de la implementación de nuevas tecnologías, se trata de un cambio profundo en la forma de operar que tiene impacto en los mercados, economía y cultura, así como en la forma de brindar valor, generar ingresos y mejorar la eficiencia en las personas.
Sin embargo, para muchas empresas, este cambio despierta temor y hasta resistencia, y esto se debe a que muchas veces no saben cómo iniciar dicho cambio o creen que implementarlo es muy complicado.
Es un hecho que la incursión en el mundo digital es diferente para cada organización, como por ejemplo, el mercado, el tamaño, la propia estrategia de negocios y, en general, sus necesidades específicas. Para lograr una transición exitosa a la digitalización, hay tres pilares fundamentales que cualquier empresa debe tener en cuenta:
Procesos:
Son la base del negocio, le da una estructura a la organización y se determina cómo se deben hacer las cosas, además son valiosos porque acumulan todo el conocimiento que crea la empresa.
Para llevar a cabo una actualización digital, el primer paso es revisar profundamente los procesos y procedimientos con la finalidad de que estén actualizados, también sirve para identificar errores, reprocesos, intersecciones entre áreas y tareas específicas.
A partir de la revisión de estos flujos de trabajo y las áreas del negocio relacionadas con las tareas operativas, se da este cambio profundo que impacta a los ámbitos administrativos, productivos, comerciales y mercadológicos de la compañía.
Tecnología:
Una vez que se determinan los procesos críticos para la operación del negocio, se puede saber el tipo de tecnología que se requiere para operarlos.
El objetivo es integrar todas las partes de la organización, contar con sistemas que los optimicen y hagan más eficientes, además de compartir la información que se genera en cada área.
Cuando incorporamos tecnologías digitales eficientes y claras, podemos liberar a las personas de tareas innecesarias, además, la atención se centra en la creación de estrategias que generen más valor para el negocio y que contribuyan al desarrollo del talento.
Algunas de las herramientas tecnológicas que se pueden utilizar son: aplicaciones móviles para clientes, internet de las cosas (IOT), tecnologías en la Nube, Inteligencia Artificial, realidad virtual y aumentada, entre otras.
Personas:
El cambio en los procesos de cualquier organización se refleja en las habilidades y aprendizajes de las personas que los implementarán, esto tiene como resultado un fuerte impacto en la cultura organizacional.
En este sentido, el entrenamiento y las capacitaciones a los colaboradores son fundamentales, también, las estrategias de comunicación pensadas para quienes impacta la digitalización, lo cual incluye al personal, los clientes, inversionistas, proveedores y todos los públicos con los que haya interacciones.
Antes de comenzar a crear una estrategia de transformación digital para cualquier negocio, se debe tener en cuenta que esto implica mucho más que solo la tecnología, ya que la clave no radica solamente en elegirla y llevarla a cabo, sino también en contar con expertos que te ayuden a optar cuál es la mejor opción. En MCM Telecom no solo tenemos las herramientas adecuadas para su implementación, sino también un equipo experimentado con el conocimiento necesario para garantizar el éxito.
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